Sin más, acá esta la charla con Nacho:¿Cómo has vivido toda tu vida la relación con la política, desde la familia, desde tu propia militancia y desde tu último disco que se llama “Yo nunca me metí en política”?
El disco tiene la respuesta, no académica, sino de lo que me pasó a mí. Para mí fue muy espontaneo, en mi casa se hablaba de política, y empecé a militar el primer año de secundario, asique nunca le tuve miedo, siempre la entendí como una herramienta para cambiar las cosas. Nunca se me ocurrió que el marketing, el autoritarismo, ni la mística, ni algo mágico fuera a hacer que se produjera un cambio sino que iba a ser desde la política.
Y la historia me da la razón, los cambios buenos y malos son por la política. Hubo años donde estaba dando vueltas la idea del “fin de la historia” de que había triunfado la derecha y que no había posibilidad de cambio, y solo desde la política se pudo rebatir esa idea, que también era política aunque nos querían hacer creer que la política no servía para nada.
La mia es una relación espontanea porque aparte entiendo que todo es política, las cosas más sencillas, las relaciones publicas, desde el jardín de infantes.
¿Qué vinculación encontras en la política con la cultura popular? ¿Te definís como un cantante popular?
Soy un artista popular absolutamente, porque no adjetivo al artista según la convocatoria sino sos un rato popular un rato no y hoy el artista popular más grande seria Justin Bieber. Yo defino a un artista popular cuando es emergente de su pueblo, cuando tiene una identidad, cuando muestra una sintonía con las cosas populares. El artista verdadero no se entrena para ser famoso, se entrena para ser artista, hoy cualquier muchacho que este en una sala de ensayo o que está tocando en un estadio puede ser un artista popular siempre y cuando su contenido tenga que ver con el pueblo. Ricardo Fort es una persona muy famosa pero no es un artista popular, no refleja en su arte algo que le esté pasando al pueblo. Es como si fuera un personaje de parque de atracciones, estrafalario, una mujer barbuda, la diferencia que el establece es el maltrato, la vanidad y todas esas cosas.
Yo si siento que hay artistas que conjugan todas las aristas de artistas populares, porque lo manifiestan en su repertorio, porque tienen también convocatoria y porque dejan una marca en el pueblo. No solamente toman cosas del pueblo, como tomo yo las influencias del pueblo.
Valoramos de vos Ignacio que “nunca especulaste” y siempre estuviste en contra de los poderes de derecha…
Entiendo que esos poderes, que siempre estorban, no están hoy en la administración pública sino no tendría ningún problema en crear una canción hacia a ellos, siento que están en otro sitio y los sigo buscando, los sigo ridiculizando. Hay personajes y situaciones que se bancan una canción en contra, y otras que no. Le puedo hacer una canción en broma a Cobos, pero no podría hacerle una canción a los chicos de Malvinas, a los desaparecidos.
Ese compromiso, sin especular, es espontaneo sino no podría haber manifestado que era de River, si iba a especular con cuantos discos menos iba a vender por la gente de boca. Siento que en mi caso debo ser asi. Ahora hay muchos artistas que apoyan este gobierno, este proyecto, pero no son tantos los que lo hacen cuando las papas queman ni con las temáticas mismas que generan políticas.
El artista con facilidad se manifiesta sobre un concepto que no molesta a nadie, entonces puede defender algo ecológico, que no maten a las ballenas de Groenlandia, pero en verdad hay que hablar del “metro cuadrado que pisamos”. Yo he ido a eventos de Derechos Humanos en todo el país, fui a reclamar que se haga efectiva la Ley de Medios, ahí somos siempre los mismos. Cuando es un escenario de festejo, ahí hacen cola hasta las vedettes, todos quieren estar. Estaría bueno que vengan más veces, porque los necesitamos a los artistas, no los critico, a mi me parece bien que estén en actos de celebración, artistas grosos, que la gente se divierta, que cobren su cachés estrafalarios y también me gustaría que aparezcan en otras oportunidades.
Lo que seguro no me provoco fue sorpresa, yo estaba seguro que iba a ver en algún momento un gran reconocimiento para Néstor, la verdad pensaba que iba a ser con las elecciones que estamos transitando en estos días, nunca pensé que se iba a manifestar en una desgracia. Porque esa cimiente yo la veía, la veía en casa con mis hijas, con mis amigos, compañeros de trabajo pero estaba invisible en la televisión. Yo iba a diferentes lugares y todo eso existía, nosotros con el conflicto de la 125 trabajábamos y lo veíamos. Íbamos a Rosario, ponele que fueron 15 tipos a hacerme un escrache pero fueron 500 a pararse en la puerta del lugar donde tocaba haciendo el aguante. Esa relación yo siempre la sentí, me paso en la costa, había pancartas de escraches y todo eso pero a la noche fueron 1000 personas al recital.
Yo me daba cuenta de que algo estaba pasando y que en algún momento iba a dejar de ser invisible, no creía que iba a ser por algo tan doloroso. De todas formas, también me provoco (la irrupción de los jóvenes en la política) una gran emoción, cuando veía en el ámbito cercano que el contador, un amigo, su familia se fueron todos a la plaza.
¿Qué te pareció el “Fútbol para todos”? ¿Crees que ahora se reflejan más las relaciones entre política y fútbol?
Me pareció sensacional, yo soy muy futbolero y esa posibilidad de ver todo eso es magnífica. Políticamente me pareció bien la idea de centrar la publicidad oficial, que no esté esparcida o fragmentada, en un lugar con potencia que es el fútbol. Me pareció bárbaro y lo sigo disfrutando, a pesar de mi tristeza en lo deportivo por el descenso de River. Cosa que no me hizo “arrugar” porque ahora saque un disco que se llama “Rivertidisimo Lado B” con mucho aguante.
La relación de la política con el fútbol, es como la relación con la política con el atletismo, con todo. El poder político se tiene que dar cuenta que tiene que promover las actividades físicas, las motivaciones para la gente. Ademas en el linaje peronista el deporte esta siempre presente, en las grandes batallas de Gatica en el Luna Park y el Gral. Peron en el ringside. Los logros automovilísticos, siempre estuvieron cerca. Esos acercamientos se dan y después el tono, las texturas las ponen las personas que las practican, la misma acción hecha por mala gente puede resultar nociva. Hay mucha gente que se acerca a la política, para chapear con el deportista, la fama y esas cosas.
Asi es la relación de la política con todas las cosas, cuando se trabaja en el marco de una corriente política con una ideología determinada es más probable que su estilo sea lo que uno espera de su gestión. Es lógico que la gente de la cultura menemistas sean chorros, porque asi concebían a la cultura en esa época.
Excepto Grondona que nunca cambia…
Si bueno pero uno no se puede quejar porque son organismos autárquicos, tienen su propia regla. A veces hacen criticas del tipo “el gobierno hizo el futbol para todos con Grondona” ¿Y que querés que lo saque? Grondona sale elegido por los dirigentes de los clubes, ellos tendrían que blanquear su relación con el "status quo" de su asociación.
Si el gobierno sacara a grondona le dirían intervencionista, si vamos a sacar a Grondona de la AFA, vamos a echar a Bussi de la FAA, cada uno negociara y se bancara lo que se tenga que bancar. Porque es muy fácil escuchar a los dirigentes deportivos, mucho bla bla pero algo debe tener porque lo votan. Lo mismo pasa con ciertos sindicalistas, sino arma una agrupación y sácalo, mientras tanto él es el representante de esa organización.
Es una marca que atraviesa al país, es una sensación rara, difícil de explicar para el hincha y muy novedosa para todos, (ahora en la B) es un suceso de convocatoria, de interés. Es un fenómeno que a la larga nos hace bien a todos, le hace bien al país para que vean que hay transparencia, que River se puede ir. Despues deportivamente cada uno da su opinión, de la debacle institucional, si nos bombearon los árbitros. Todo es posible, si River está en el descenso.
La utopía para el boquense se hizo realidad, en este año ser boquense y kirchnerista debe ser un orgasmo todos los días.
Es una cuestión muy fuerte porque es parte de mi cultura, yo antes de ser peronista, antes de ser estudiante, antes de ser un montón de cosas que completan mi identidad, ya era de River, incluso antes de ser músico, antes de ser padre. Es un sentimiento muy primitivo, muy básico, pero a la vez muy autentico, la identificación, la pertenencia es algo que está en el ser humano. Es algo parecido al estandarte que portaba un guerrero de hace mil años, es algo muy primitivo pero mucho mas valida que pertenecer a una cofradía virtual, a una tarjeta de crédito, cosas que podes cambiar a cada rato, en cambio la otra pertenencia es algo absolutamente autentica.
Yo a veces charlo con hinchas de Boca, y trato de mantenerlo en un marco deportivo, folclórico, pero a veces te vienen con eso de los militares y es un golpe a traición, porque es algo que nosotros también lo sufrimos. El que quiere asociar a River con la dictadura porque se construyo una tribuna para el mundial 78, tiene que saber que primero la tribuna la pagamos. Y segundo que en la mesa de tortura a habido torturados y torturadores hinchas de todos los clubes. Yo en una discusión no le recrimino al boquense la impronta macrista, lo votaron los socios, no voy a decirles que los aumento del ABL es por culpa de Boca.
En eso también tenemos que ascender, como ustedes ascienden al estar militando, también el pensamiento popular tiene que ascender. La militancia juvenil es un ascenso, porque no se forma nomas con la energía, el aguante y la buena cara. La militancia implica además conocimiento, una dinámica de estudio, de dialéctica, porque uno de los objetivos es sumar a otros compañeros y para eso tenes que estar preparado y para la batalla de la discusión. Sobre todo cuando no estás ayudado por los grandes medios, entonces como salís de ahí, mejor. Es un ascenso ser un militante, y la revalorización de esa palabra ha sido muy buena. Antes hablar de la “época de la militancia” era hablar de los viejos, como los tanos te hablaban de la “época de la guerra”. Ahora la militancia es absolutamente actual, implica entrega, implica amor, desinterés, humildad. Saber que el militante es el Sargento Cabral, hoy salvas a San Martin pero si mañana te mandan a baldear el convento temes que ir, no te podes arrogar ningún título.
Lo jóvenes de ahora lo están honrando muchísimo y en esa admiración que tienen por los jóvenes de los 70 yo estoy seguro que la mayoría de los militantes de hoy en situaciones parecidas a las de ellos serian tan valientes y tan heroicos como fueron ellos.
Eso es muy bueno porque una de las cosas que más me gustaban del General Perón era eso del “transvasamiento cultural”, los jóvenes son el futuro. Yo no soy quien para discutir al General pero eso del transvasamiento era sanata, era decirles a los jóvenes vengan dentro de 10 años...(risas)
Podríamos haber seguido hablando con Ignacio un rato más, el tipo es sencillo, coherente, habla pausado y cada tanto dice una frase de artista, de esas que podrían ser parte de una próxima canción y hacerte reflexionar. Dos asistentes golpean la puerta y nos despedimos rápido, Ignacio pide 3 minutos más "para fumarse un cigarro", los cumple y sale a escena, una vez más, para hablar, para cantar, para contagiar.
*Agradecemos la posibilidad de hablar con Ignacio Copani a la gente de "Café Cultura", al Chino Correa y a los compañeros y compañeras de Adepp que nos permitieron interponernos unos minutos en la actividad para realizar esta entrevista.
